Con los precios en baja, los productores pusieron un freno a las ventas de la última cosecha de soja, que retrocedieron de un nivel semanal por encima de 700.000 toneladas a 400.000 toneladas. El disparador es que la soja sigue en caída. De hecho, ayer sumó otra más: en el mercado local, la mayoría de los compradores ofreció por la oleaginosa de la última cosecha 1.180 pesos por tonelada, 14,8 % menos que a fines de agosto.

En medio de la marea, ayer sólo un operador estuvo dispuesto a pagar 1.220 pesos. Mientras tanto, en Chicago también sigue para atrás. Ayer, la posición noviembre cerró en 426,23 dólares por tonelada, una pérdida de US$ 6,43 respecto de la jornada precedente. Según diversas estimaciones, de la cosecha pasada los productores todavía tienen unos 15 millones de toneladas sin vender que no tienen precio. Esa mercadería está valuada hoy en US$ 4.260 millones. Hace quince días, con precios más altos, ese tonelaje valía US$ 4.800 millones, con lo cual los productores ya resignaron US$ 600 millones en poco tiempo.

En agosto pasado, los productores venían con un promedio de venta semanal de 770.000 toneladas y saltaron a 780.000 con la llegada de septiembre. Pero sobre fines del mes pasado se produjo un abrupto cambio de tendencia que sigue hasta hoy. Según cálculos de Gustavo López, de Agritrend, a partir de datos oficiales, entre el 21 y el 28 de septiembre pasado esa cifra bajó a unas 400.000 toneladas. «Esto indica que el productor está reacio a vender con estos precios», señaló.

«Nadie quiere convalidar estos precios», afirmó Agustín Vitta, de fyo.com, en Rosario. El analista puso un ejemplo práctico: en los últimos días hubo registros de operaciones que apenas rondaron los 10.000 a 15.000 toneladas, cuando antes de la debacle de los precios estaban varias veces por encima de ese nivel. «La semana pasada, incluso, hubo días sin cotización ni siquiera en la pizarra», agregó Vitta. «A estos valores veo mucha parálisis por parte del productor», añadió Alejandro Vejrup, de la Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (Aacrea). Patricia Bergero, de la Bolsa de Comercio de Rosario, indicó que en medio de la baja los productores «se han retraído hasta ver lo que sucede». De todos modos, destacó que antes las ventas «venían dentro de lo normal». Todos esperan un rebote hacia arriba. Desde Intagro SA, Flavia Rossi dice que «la perspectiva es que [el precio] está cerca de su piso». Pero mientras se sienta sobre la cosecha vieja el productor ya tiene vendidos seis millones de toneladas de la próxima cosecha, que todavía no sembró. Sólo en la última semana a la exportación le vendió unas 700.000 toneladas.

Bolsa Cereales (Fernando Bertello)