Logo-INTATécnicos del INTA desarrollaron y patentaron un prototipo para la extracción y elevación del cereal almacenado en bolsas plásticas. Simplifica la tarea, reduce costos y disminuye los daños.

En la Argentina se almacenan 70 mil toneladas de arroz en bolsas plásticas. Al extraerlos, una parte de los granos se quiebra con pérdidas de hasta el 5% de la producción. Para evitar esto, técnicos del Instituto de Ingeniería Rural del INTA desarrollaron y patentaron un prototipo que simplifica la tarea, reduce costos y disminuye los daños.

Oscar Pozzolo, director Instituto de Ingeniería Rural (IIR) del INTA Castelar, destacó el logro por beneficiar directamente al sector arrocero: “El porcentaje de grano entero es el principal componente formador de precio, produciéndose bonificaciones directas por cada punto que se comercialice por encima del 60%. Cualquier elemento que modifique estos valores repercute directamente en el precio final”.

En esta línea, Horacio Aguerre y Facundo Bré –alumnos de la carrera de ingeniería electromecánica, con la tutoría de Pozzolo– desarrollaron un prototipo, en base a las maquinarias existentes, que evita los daños en los granos, al tiempo que simplifica la tarea y reduce los costos.

Actualmente, el desembolso de los granos se realiza con extractores mecánicos que, de acuerdo con estudios del IIR, quiebran los granos y generan pérdidas de hasta el 5% de la producción. “La mayor parte del daño –aseguró Pozzolo– es producido por los sinfines, esta se ve agravada por factores como la inclinación y el desgaste generando hasta 8 veces más de quebraduras que un sinfín horizontal y en buen estado”.

Asimismo, el especialista aclaró que a pesar de existir sistemas neumáticos que no generan un daño considerable al grano, tienen una baja capacidad de transporte, una demanda de potencia elevada y un elevado costo operativo y de adquisición.

Al detalle

El nuevo extractor se destaca por su simpleza y por su reducida cantidad de piezas. “Se desarrolló una máquina híbrida que combina el funcionamiento de los sistemas mecánicos y neumáticos, eliminando sus debilidades”, afirmó el director del IIR.

Así, gracias al financiamiento de la Fundación del Nuevo Banco de Entre Ríos, se pudo construir el prototipo en escala 2:1 simplificado, lo que permitió corroborar el correcto funcionamiento del desarrollo. Pozzolo destacó este logro y explicó que la innovación, recientemente patentada, también es aplicable a otros granos.

El prototipo tiene una capacidad de transporte de 80 toneladas por hora que, según Pozzolo, “podrían ascender a 200 o más” si se modifican las configuraciones del diseño inicial y parámetros de funcionamiento.

A fin de reducir los daños en los granos, los técnicos eliminaron el sinfín inclinado de elevación y lo reemplazaron por una rueda que traslada a los granos desde la salida de la plataforma de recolección hasta el sector de barrido. Allí, los granos se enfrentan a una corriente de aire ascendente –generada por un ventilador– que los obliga a abandonar la rueda y posicionarse en un tubo para luego descargarlos mediante el ciclón separador.

Del sistema mecánico se adoptó la plataforma de recolección y del neumático la etapa de elevación, compuesta por el tubo de elevación y ciclón de descarga. Asimismo, se eliminaron las etapas de recolección –con su correspondiente turbina– y las de transporte y direccionamiento interno –para evitar el ciclón de separación y la válvula rotativa–.