Los días secos que siguieron al cierre de la semana pasada permitió avanzar a buen ritmo con las labores de trilla, y el avance de la cosecha de soja se pone en línea con el promedio quinquenal. En maíz, precios y condiciones de mercado aceleran los negocios.

Luego de haber iniciado con cierta lentitud, la trilla de soja tomó ritmo en las últimas semanas y ya se alcanzó el 81% del área a cosechar, de acuerdo a datos de MAGyP. Si bien esto se encuentra por debajo del 91% que se registraba a igual fecha del año pasado, en estos últimos siete días se logró superar al promedio de los últimos 5 años (80%).

En lo que respecta al maíz, también según datos proporcionados por MAGyP, el avance de las labores de cosecha alcanza el 40% del área objetivo, por detrás del 54% de hace un año y del 45% que, en promedio, se llevaban recolectadas a estas alturas en las últimas cinco campañas. De todas maneras, tal como se comentó en estas líneas del Informativo de la semana anterior, esto responde a que, producto de la sequía de los meses de septiembre y octubre, varios de los lotes que estaban destinados a sembrarse con maíz de primera/temprano debieron optar por retrasar las siembras por falta de agua.

De acuerdo a la información provista por la Guía Estratégica para el Agro, este retraso en las siembras acabó siendo beneficioso en algunos casos, ya que el maíz tardío se vio menos afectado por la falta de lluvias del mes de febrero que el temprano y recibió agua suficiente en momentos clave del desarrollo del cultivo. Si bien los rindes del temprano no se vieron tan afectados como los de soja, el maíz tardío presenta buenas perspectivas en cuanto a los rendimientos. Además, a pesar de que en las últimas semanas no se cumplieron los pronósticos de lluvias, esto ya no afecta al cultivo ya que ha alcanzado su etapa de maduración fisiológica y resta que se seque para poder ser cosechado.

Pasando a la logística de los granos que se están cosechando, el ingreso de camiones con maíz a los puertos del Gran Rosario responde a este retraso en la cosecha respecto de las campañas anteriores. Tomando el ingreso acumulado desde el 11 de febrero (se toma esta fecha ya que a mediados de febrero es cuando se inicia la cosecha de las regiones más al norte del país), arribaron a las terminales portuarias de la región 270.000 camiones que transportaban maíz, mientras que en los últimos dos años a esta fecha habían ingresado más de 315.000. Tal como se puede apreciar en el gráfico que sigue, el número de camiones ingresado en la semana anterior fue el más alto desde que inició la campaña, denotando un mayor dinamismo.

En lo que respecta a la soja, tomando el acumulado desde el 11 de marzo hasta la fecha, el número de camiones que arribaron a las terminales portuarias/plantas procesadoras del Up River asciende a 274.000, evidenciando así un ritmo de ingreso que se encuentra en línea con el de los últimos dos años (275.000 en el 2020 y 274.000 en el 2019).

Pasando a los embarques, los despachos de maíz desde los puertos del Gran Rosario marcan una caída respecto del 2020. En los primeros tres meses de la campaña se enviarían al exterior 8,4 Mt desde las mencionadas terminales portuarias (para mayo considerando lo ya embarcado y lo programado para embarcar), mientras que en el mismo período del año anterior los embarques alcanzaron 10,1 Mt. Además, se observa que los despachos de mayo serían menores a los de abril (2,6 Mt vs. 3,2 Mt respectivamente). Por el lado de la soja y sus derivados, se tiene que en los primeros dos meses del ciclo comercia, los embarques de harina/pellets alcanzarían 5,6 Mt (vs. 5,2 en el año anterior), los de aceite serían prácticamente iguales (1,21 Mt en este año vs. 1,17 en el 2020), y los despachos de poroto de soja registrarían una caída, ya que entre abril y mayo de este año sumarían 300.000, mientras que el año pasado totalizaron 1,4 Mt en el mismo período.

El mayor volumen de embarques de derivados de soja responde a la mejora en los precios de exportación, particularmente del aceite de la oleaginosa, que repercutió favorablemente en el margen bruto. Como consecuencia, el nivel de crushing aumentó en abril a 4,2 Mt, un 24% por encima de lo industrializado en marzo y un 15% por encima del volumen procesado en abril del 2020. Además, es el mayor volumen mensual desde julio de 2019, y el segundo tonelaje más elevado para un mes de abril en la historia, sólo detrás de lo procesado en aquel mes de 2015. La producción de aceite obtenida alcanzó así 843.700 t, mientras que el volumen de pellets/expellers de la oleaginosa conseguido sumó 3,1 Mt.

Otro dato destacable de las últimas semanas es lo ocurrido en la comercialización de maíz. A pesar de la menor producción proyectada para esta campaña en relación a la anterior, el volumen de granos comercializados creció fuertemente en el último mes y superó el nivel alcanzado en el 2020/21 a estos momentos del año. En las últimas cuatro semanas se cerraron negocios de maíz por casi 5 Mt, y se ya se han comercializado 27,9 Mt de las 48,5 Mt de producción proyectadas, es decir, un 57%. El año anterior a igual fecha, en tanto, se llevaban negociadas 24,8 Mt de las 51,5 obtenidas, lo que equivale al 48%.

Para finalizar, un comentario respecto de los precios en el mercado local. Al igual que lo ocurrido en Chicago, el mercado internacional de referencia de productos agrícolas, los precios en la plaza local se han retraído en la última semana. Tomando el precio de la Cámara Arbitral de Cereales de Rosario, la soja retrocedió un 5% desde el máximo alcanzado el pasado miércoles 12, y cerró el jueves en US$ 344/t. La caída en maíz fue más aguda, ya que desde los US$ 245 /t que el cereal alcanzó el 7 de mayo (máximo histórico en el mercado local), se replegó hasta US$ 214 /t, es decir, un 12%.

También resulta interesante ver qué ocurre con los precios del maíz tardío. La cotización del futuro de maíz con entrega en julio en Matba-Rofex, que es el mes en el que ingresa la cosecha de este segmento del cereal, se ubicó el día de ayer en US$ 217 /t, evidenciando también un retroceso respecto del máximo alcanzado el día 7 del corriente mes (US$ 244 /t en aquel momento). Sin embargo, cabe resaltar que el precio actual de este contrato (maíz con entrega en julio) es el más elevado para el momento del año en la historia.

Por último, dado que ya ha comenzado la comercialización de la campaña 2021/22, conviene tener un pantallazo de lo que está ocurriendo con los futuros a cosecha para el año próximo. El precio de ajuste contrato de maíz de Matba-Rofex con vencimiento en abril 2022 fue US$ 195/t, un 7% por debajo del máximo de principios de mes. De todas maneras, tomando los precios de los contratos con entrega abril un año antes de la cosecha, estos valores también se encuentran en máximos en la historia.

Algo similar ocurre con la soja 2021/22. El contrato con entrega Mayo 2022 cerró el jueves pasado en US$ 313,5 /t, retrocediendo un 4% del máximo alcanzado el pasado 7 de mayo. Pero tomando todos los futuros de soja mayo de Matba-Rofex a un año del vencimiento, se encuentra en valores récord históricos.