Los mixers saltan de la ganadería para encontrar un nuevo nicho en el ámbito de las energías renovables.

Es una tendencia presente tanto en Sudamérica como en Europa y abre para los fabricantes la posibilidad de adaptar los mixers estacionarios al funcionamiento de las plantas de biogás.

Ejemplos

Montecor: La compañía de Monde Buey (Córdoba) adaptó el carro racionador DH 20 para alimentar digestores en plantas de bioetanol. Tiene entre sus clientes a firmas como Bio4, de Río Cuarto (Córdoba); el Grupo Riccillo, que inauguró una planta de bioenergía alimentada con efluentes aviares y porcinos en General Alvear (Buenos Aires); o Adecoagro, que maneja más de 7.000 vacas en dos tambos estabulados en Christophersen (Santa Fe), donde instaló un biodigestor con 1,4 MW de potencia.

Mary: La empresa uruguaya adaptó sus mixers para alimentar plantas que trabajan con biomasa forestal.

Fliegl: Diseñó el mixer estacionario Biomat, apropiado para ingredientes sólidos, con una capacidad de 70 toneladas.

Kuhn: Lanzó en Europa la línea de mixers estacionarios Centramix, específica para procesos de digestión anaeróbica. Viene en versiones de 4.000 a 45.000 litros de capacidad, adaptadas a las funciones de mezcla que requieren los biodigestores.